Por las conferencias de diseño del Blanc! han pasado todo tipo de conferenciantes, desde los que nunca habían dado una conferencia, hasta los que dan una o dos al mes. Desde personalidades más introvertidas hasta otros que se adueñan del escenario como si hubieran nacido para ello.
Sin embargo, existen una serie de tips o consejos que harán que la conferencia sea más amena e interesante. Y que resultará en una experiencia positiva tanto para el orador como para el oyente. Y no solo se aplica a las conferencias de diseño, sino a cualquier otra situación en la que tienes que hablar ante un gran público.
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Decálogo del buen conferenciante para conferencias de diseño y otras presentaciones
Este decálogo del buen conferenciante es el resultado de más de 10 años de experiencias vividas (y a veces sufridas) en los escenarios de las diferentes ediciones del festival. Una suerte de consejos básicos que tienes que tener en cuenta para no repetir los errores que muchos hemos llevado a cabo en el pasado. Así que a aquí tienes…
1 – Habla de lo que te apasiona y no actúes
Muchos ponentes, sobre todo los primerizos o los que no tienen mucha experiencia hablando delante de un público más o menos masivo, son presa de los nervios en el momento de subir al escenario, pero todo pasa cuando empiezan a hablar con pasión de aquello de lo que saben o son expertos. No intentes ir más allá añadiendo contenidos de los que no eres especialmente experto, te podrían meter en un embrollo. Sobre todo si luego hay preguntas.
Habla sólo de lo que sabes, que es además por lo que te han invitado como orador.
Lo mismo se aplica a la falsa creencia de que un buen conferenciante tiene que ser gracioso. Ayuda, es verdad, a que la comunicación sea más fluida (la risa es el mejor conector para relacionarnos con los demás), pero no lo fuerces si no te sale de manera natural. Sé honesto con tus emociones, e intenta transmitir esa pasión por tu trabajo.
2 – Comunicación corporal
Decimos mucho con la expresión corporal, por lo que debemos siempre adoptar una postura relajada y natural. Habla siempre mirando al público, y si tienes que aplacar los nervios, busca caras conocidas entre los asistentes. Y si no conoces a nadie, procura hacer un poco de networking social antes de tu charla.
Utiliza las manos para enfatizar conceptos, camina de forma tranquila y relajada, y estate atento siempre a la posición base en el escenario, para no salirte de los focos!
3 – No leas ni memorices
El contenido de la conferencia puede ser genial, y el orador el más experto en su campo, pero si lee el contenido como si de un discurso se tratara, resultará en una conferencia de diseño aburrida, eterna y difícil de seguir. Simplemente porque nadie habla como escribe.
Tampoco es recomendable memorizar la presentación palabra por palabra. No sólo te llevará más trabajo prepararla, sino que, a menos que seas un muy buen actor, se notará mucho lo “robótico” de la situación. En cambio, sí que puedes reducir el escrito a conceptos e ideas que desarrollarás de forma natural. Te puedes valer de tarjetas si quieres, e incluso guionizar el contenido a través de los slides de la presentación (para evitar llevar papeles encima) pero recuerda: nunca, nunca, nunca, leas ni memorices en tus ponencias, sean o no conferencias de diseño.
4 – Utiliza anécdotas personales
Pero sin pasarse ¿he? pueden ser una buena guarnición, pero no el plato principal.
Hacerlo te ayudará a que los asistentes empaticen contigo, haciendo que todo fluya de una manera más natural.
Por lo general, si el público es del mismo sector que el orador, también se puede apelar a anécdotas dentro de la profesión, comunes en gran parte a muchos de los presentes (sobre todo si se trata de conferencias de diseño). Que los asistentes se identifiquen con el orador, generará además un sentimiento de pertenencia de grupo y una sensación de “estar entre amigos”, que mejorará notablemente el resultado de la conferencia.
5 – Gifs de gatitos en la presentación. Toma agua
No abuses de los GIFs animados en tus presentaciones, algo muy común en las conferencias de diseño. El primero es gracioso, el segundo es divertido, el tercero todavía cuela, pero si insistes mucho ya huele.
Y si estás nervioso o estás muy nerviosa, toma agua antes de salir al escenario. Estarás enviando un mensaje a tu cerebro de que todo está bien, que no hay peligro ¿O acaso has visto alguna vez una gacela detenerse a tomar agua mientras un león la persigue?
6 – Controla el hilo de tu conferencia
Cuando hablas de lo que te apasiona, es fácil irte por las ramas con temas que te vienen a la cabeza. No está mal si lo haces, y de hecho la conferencia será más natural. Pero ten en cuenta que tienes un tiempo limitado, y que quizás te quedes con contenidos más importantes en el tintero.
Reduce los temas a una sola gran idea, y conecta cada punto de tu presentación con esa idea. Te permitirá comenzar y acabar la conferencia transmitiendo un mismo mensaje sin dejar que se diluya en tu propio relato.
7 – Dales algo, comparte conocimiento
Cuando das conferencias de diseño (o cualquier otro tipo de presentación ante un gran público), el público espera aprender algo de ti, de tu experiencia, de tus conocimientos. De nada sirve hablar sólo de los grandes clientes que tienes, o los grandes proyectos con los que has trabajado. Enseña en cambio, las tripas de tu trabajo, la estructura de tu empresa, tus referentes, los lados B, los errores y sus soluciones. Piensa en lo que a ti te gustaría ver en una conferencia, y aplícalo.
8 – Muéstrate tal y como eres ¡y aparca el ego!
No creas que por tu status de conferenciante deber probar que eres (en cierta manera) superior al resto de asistentes. No tengas miedo en hablar de tus errores, tus vulnerabilidades e imperfecciones.
Los sentimientos y emociones conectan a las personas, y no sólo el humor lo hace. Todos somos imperfectos, y mostrarnos naturales nos hará más humanos.
No tengas miedo de mostrarte tal y como eres, y asegúrate de estacionar tu ego. Es un asesino de conexiones personales.
9 – Utiliza los ritmos con contenido multisensorial, sobre todo si de trata de conferencias de diseño
Cuando estés realizando el guión de tu conferencia, piensa en el ritmo del contenido. Y allí donde puedas, utiliza contenido multisensorial en tu presentación. Que no todo sea hablar y sólo hablar. Que tampoco tiene nada de malo, pero añadir contenido audiovisual a la presentación ayudará a manejar los ritmos y las pausas.
10- Interacciona con la audiencia
No es imprescindible, pero sí recomendable. Te ayudará a conectar con los asistentes. Pregúntales algo y que levanten la mano, bájate del escenario y háblales de forma más cercana, haz regalos (postales, carteles, chapas, pegatinas) te ayudará además a tomar el control de la escena y a empatizar con la audiencia.
Conclusiones ¡Ofrece una gran conferencia de diseño!
Un buen ponente no esconde sus sentimientos, se comporta de manera natural, y sólo habla de aquello que sabe y le apasiona.
Mantiene a raya su ego y es fiel al argumento de su conferencia.
Y por sobre todas las cosas, piensa en lo que los oyentes aprenderán de su intervención, y buscará siempre poder compartir sus experiencias (buenas y malas), que ayudarán a sus colegas de profesión en su vida profesional.